La ley de Murphy nos dice que, si algo puede salir mal, ¡Saldrá mal! Esta ley empírica propuesta por el ingeniero aeronauta estadounidense Edward Murphy explica de manera básica el origen de un accidente.
Todos hemos sido testigos o hemos sufrido algún accidente, que puede ir desde romper un plato hasta situaciones que ponen en peligro nuestra vida o la de otras personas. Es entonces cuando hablamos de accidentes mortales. Normalmente este tipo de accidentes suelen afectar objetos materiales y a terceros por lo que la dimensión del accidente aumenta.
Un accidente es un hecho imprevisto, que altera la marcha normal o esperada de las cosas, que causa daños ya sea a cosas materiales, a personas, al ambiente o a todas las anteriores en conjunto.
¿Qué tipos de accidentes existen?
Accidentes personales
Es cualquier accidente que afecte directamente a un individuo provocando algún tipo de Daño.
Accidentes materiales
El accidente afecta la integridad estructural de bienes materiales como casas, automóviles, celulares, computadoras, piezas de arte, artículos de colección, etc.
Daños a terceros
El tipo de accidente que implica daños a terceros engloba los dos anteriores, pues es el daño producido a una persona y/o a sus pertenencias producto de las acciones no intencionales de otra persona.