Cuando se habla de accidentes laborales solemos pensar en fábricas o construcciones, pero no en oficinas, sin embargo, los accidentes en oficinas son mucho más comunes de lo que crees y ocurren con mayor frecuencia.
Toda persona que trabaja en oficina ha tenido por lo menos un accidente laboral.
¿Qué accidentes puedo tener en una oficina?
- Caídas a un mismo nivel: pueden ocurrir por una silla defectuosa.
- Caídas de escaleras: por una inadecuada infraestructura, mala iluminación u objetos mal colocados que estorben y propicien un accidente. (Pueden provocar lesión en las vértebras y hasta parálisis.)
- Torceduras, esguinces y fracturas por resbalar en un piso mojado o en malas condiciones. (son las lesiones graves más frecuentes en oficinas).
- Golpes: por gabinetes o cajones abiertos o mal ubicados.
- Electrificación: por hacer mal uso de los contactos eléctricos sobre exigiéndolos o que la instalación eléctrica esté en malas condiciones.
- Cortaduras: por objetos filosos como guillotinas, abrecartas y tijeras.
¿Cómo se genera un accidente?
Todo accidente tiene tres elementos.
- El agente, objeto peligroso o mecanismo que lo produce, (piso resbaloso, contactos eléctricos, silla averiada, calzado inadecuado, etc.)
- El medio, es la circunstancia física o social en la que se produce el accidente.
- El accidentado, es quien sufre el accidente.
La mayoría de los accidentes de oficina no suelen ser graves, pero si generan malestares físicos que muchas veces son prolongados o requieren de atención médica. ¿Alguna vez ha te ha pasado?