Nuevamente la naturaleza nos toma por sorpresa y nos da una lección, que en México, no acabamos de aprender.
Y es que el terremoto que asoló a Oaxaca, Chiapas, CDMX, Puebla, Hidalgo, Estado de México y Morelos, no ha terminado de surtir efecto en la sociedad. Sin embargo, aquellos que si aprendieron su lección del terremoto del 85, saben que los daños materiales van más allá del día del terremoto. Muchas personas y empresas desde entonces han tenido la conciencia de comprar un seguro de daños que ampara su casa o su negocio.
Específicamente la cobertura de Terremoto, está indicada para zonas en las que la actividad sísmica es intensa y sus efectos se pueden sentir en cualquier momento. Generalmente se contrata como parte de una póliza que viene en “paquete” en la que se cubre también daños por incendio, rotura de cristales, equipo electrónico, dinero y valores, responsabilidad civil, etc…
Al igual que la cobertura de Erupción Volcánica, estas mismas zonas se vuelven nuevamente peligrosas. Parecería que este fenómeno natural es como cosa de cuentos. La verdad es que nadie quisiera verse envuelto en una tragedia de esta naturaleza. Mucho menos perder todo el patrimonio que se ha logrado en un segundo en la vida.
¿Cómo contratar este seguro?, ¡es muy fácil! Solamente necesitas tener a la mano el valor en pesos de tu propiedad y si eres rentas, también lo puedes contratar con la diferencia que cubres el valor de lo que sí te pertenece que son los contenidos. Y también si algo le pasa al inmueble, tú eres responsable de los daños. Éstos estarán cubiertos por esta póliza.
Contratar esta póliza es muy fácil y el costo es más bajo de lo que te imaginas.
¡Has la prueba y cotiza! NO SABES CUANDO LA PUEDES NECESITAR.