Hoy cualquiera sabe que son los brackets y para qué sirven…. Pero muy pocos saben la evolución que ha tenido esta rama de la odontología que hoy es una especialidad.
Originalmente el objetivo era meramente estético, el chiste decía Plinio el anciano, era limar los dientes elongados hasta lograr que se vieran alineados de forma adecuada.
A partir del siglo XIX; las correcciones ortodóncicas dieron un paso más allá de la mera estética. Estas correcciones empezaron a tener un enfoque terapéutico. Es decir, si la persona no tenía una “mordida” correcta llamada hoy OCLUSION DENTARIA. Se debía de someter a un proceso para lograr que esta función de los dientes se lograra de manera apropiada y a su vez se reflejara en un mejor aspecto facial.
La verdadera ortodoncia nace en 1840 con Joaquín Lefoulon y no es hasta 1900 con Edgar H. Angle que define a la Ortodoncia como una «ciencia que corrige y define las oclusiones o tipo de mordida». En la época actual, la expansión de la ortodoncia se ve claramente involucrada con el desarrollo de la aparatología logrando perfeccionar los movimientos de los dientes a partir de la II Guerra Mundial.
Las últimas décadas han permitido el desarrollo de los brackets para facilitar el trabajo del ortodoncista. Los brackets también han tenido un desarrollo muy importante dado el éxito con el que logran el objetivo funcional de perfeccionar la oclusión dentaria. Han variado de brackets de metal a cerámica y se desarrollan los tratamientos de ortodoncia invisible.
Hoy lo que hacen los ortodoncistas y aquellos especialistas que se dedican a esta especialidad es el diseño de sonrisas.
¿Suena sensacional verdad? El problema es que el tiempo que le dedicas a tu tratamiento de ortodoncia puede ser muy doloroso. Si eres de los que piensa que la belleza cuesta, que crees. ¡TIENES RAZON….!